jueves, 10 de febrero de 2011

Usare i guanti

Mañana día 11, hace 6 meses que desembarqué en Birmingham en mi aventurilla de aprender de una vez por todas inglés o al menos morir en el intento, qué ya es algo... Recuerdo como si fuera ayer la paliza de levantarme a las 5, a mi pobre madre haciendola madrugar más de lo normal para ahorrarme(nos) los 25€ que cuesta el taxi desde Torrejón a Barajas, llegar a Digbeth bastante perdido e ir con mi mapa y mi maletón por New Street sin saber que era la "calle más importante" de B'ham, joé lo que sudé ese día de agosto para encontrar el hostal.

Si bien la experiencia ha sido muy positiva, siempre con algún bajón, tipo homesick o este tío me está tocando mucho la narices, a parte de eso, muy contento, mucho inglés, muchos amigos, mucha improvisación, algo de trabajo, poco, para ser honestos, pero con la sensación de que esto me servirá para el día de mañana y aunque suene contradictorio sin pensar mucho en el día de mañana. Y es que se va acercando el momento de decidir qué voy a hacer en los próximos meses, sí aquí, sí allí... pero como decía mi abuelilla, andando se hace el camino.

Y otra cosa que cumple 6 meses es mi contrato de alquiler, así que mañana empiezo a vivir en una nueva casita, totalmente distinta a la de mi barrio en Stirchley/Bournville. Me decidí por alquilar una habitación en este barrio porque no tenía mucha idea de dónde iba a estudiar inglés y pensaba que vivir en el centro de una "gran ciudad" sería horrible; pues al final ha sido al revés, es mucho más interesante vivir en el centro de Birmingham que en las afueras, donde no hay mucha actividad y sí mucha pero que mucha tranquilidad, así que esas palizas de andar una hora para ahorrarme el taxi también se acaban.


En esta casa he aprendido un montón de cosas, como a cocinar, sí, sí, quién lo diría viendo esas tortillas, ¿no? A organizarme, a aprovechar el tiempo, vamos a no dormirme en los laureles, a elegir mejor una casa donde vivir (puff, que lección más importante), que la basura se recoge una vez a la semana, a no poner los pies debajo de puertas asesinas, a cerrar una puerta inglesa, a perseguir gatos por casa, a tolerar los niveles de suciedad ingleses, a estar solo y no en soledad, vamos un montón de cosas que van haciendo poso.

Finde con poso, gracias a Sabber
Ahora me acuerdo de todos mis compas que han pasado o viven en la casa: Sabber, sin duda el best one, mi mejor amigo iraní, 19 años pero muy espabilado, ahora vive en Rugby, a ver si el año que viene lo veo estudiando en la Universidad; Alí, otro muchacho iraní, tío majo donde los haya, rebosaba bueno rollo hasta cuando le ganaba al fútbol en la Xbox; Marie, la française, mi compañera de planta, muy maja la muchacha, pero se ha pasado más tiempo fuera de casa que yo, asuntos Erasmus, you know, así que cuando coincidiamos nos tirabamos un buen rato charlando; Eugene, un buenazo búlgaro, enamorado de España y de los edificios y es que ahora se está buscando la vida en Leeds como ingeniero de edificación; y luego estan los ingleses, de los que me gustaría decir algo bueno, pero no puedo y tampoco es plan de empezar a mentir ahora, para mí son guarros, maleducados y egoístas, vamos, mala gente y ahí me voy a parar. Y luego está Amir, mi landlord, un tío bastante majo, que se preocupaba cuando hemos tenido cualquier problemilla en la casa, una persona con la que da gusto toparse en la vida: en resumen extranjeros OK, ingleses KO.

Y como ya me voy de casa, haré un reportaje fotográfico tipo Hola y mostraré mi casita y mi habitación, aunque nada de decirme que hay mucha mierda, porque teniendo moqueta es imposible que eso esté limpio... qué asquito por Dios. Y es que cuando llegué a ver mi habitación, el cartel de la puerta ya lo anunciaba:

Usare i guanti


Vistas desde mi habitación a Ribblesdale Rd


Un poquito de la casa




El jardincillo


Y mi habitación por las diferentes fases: recién llegado, redecorada y domingo resacoso...



Pero ahora es distinto, voy a vivir con mi colega Chanbae, y eso promete, y mucho, así que esto va por las futuras borracheras juntos:


비바 코리아

martes, 8 de febrero de 2011

¡Mamá dame Dinero!


E igual que se hacía esperar la paga del domingo cuando eras crío, así estaba yo esperando el siguiente concierto de un grupo español en Birmingham y es que el recuerdo de Grey estaba ya un poco lejano y tenía mono, y no es que no haya salas o pubs donde escuchar grupos, pero la buena música en  castellano me tira, y mucho.


Así que el primer concierto de Dinero en Inglaterra, fueron a caer al Island Bar, acompañados de otros dos grupos muy interesantes: Muscle Mobile y Vault of Eagles. Al día siguiente tenían concierto en Londres, así que el viernes les sirvió para ensayo general de novedades que querían probar, por lo que tuvimos la suerte de ser de los primeros en escuchar un tema nuevo.


El grupo está formado por Sean, Rubi, Ekain y sus managers, que no hay que olvidarse de ellos, que son los que mueven el cotarro, y aunque para ser sinceros, y como les dije a ellos, no sabía de su existencia hasta que ví que Nico organizaba un concierto en Birmingham, pero pude charlar un poco con ellos y me cayeron muy bien: gente abierta y enrollada, vamos muy majos.


Esto es algo que ya sé de hace tiempo, debe haber cientos de grupos buenísimos, no muy famosos y que me encantarían, pero que no llegaré a conocer, ¡cachis! Algo así me pasó cuando redescubrí el flamenco y es que después de tantos años escuchándolo en casa, en el coche, por el día, tarde y noche, en vacaciones, y todo gracias a la obstinación mi padre por todo lo andaluz, que hizo que me resultara hasta repulsivo, pues va después y resulta que es mi estilo de música favorita, ¿qué cosas, no?

Y cuando ví el vídeo de Mentiras, supe que esto me molaba, que caña de música y de letra: 



Y para canciones cañeras: InviernoSaboreal y Trastorno Bipolar




Vamos, por 6 libras me metí un chute de buen rollo para el resto de la semana, ¡será por Dinero...!

jueves, 3 de febrero de 2011

El día de la tortilla

Hoy día 3 de febrero se celebra el archifamoso Día de la Tortilla, bueno más bien conocido en mi ciudad, y es aquí donde se nota que Torrejón de Ardoz es todavía un pueblo, con todo el orgullo de serlo ¡eh!

No es fiesta oficial y nada de eso, pero después de las fiestas de Torrejón, es el acontecimiento más importante, es hasta un día en que podías faltar al cole y no pasaba nada, y la gente se cogía el tupper y se subía al cerro del viso, que solía tener metro y medio de barro, a tomarse la tortilla casera y a hacer un poco el ganso.

Y llegados aquí, recuerdo mi primera tortilla inglesa, allá por septiembre, que resultó ser una tortilla francesa con patatas fritas sin sal... todo un desastre y hasta el día de hoy que ya me sale algo decente, así que se lo agradezco a mi ganas de comer bien y a mi madre, que es una fuente de sabiduría gastronómica inagotable, olé esas 'mamas.




#6: La última tortilla
Y haciendo de Arguiñano pongo la recetilla que sigo para 3 ó 4 personas:

- Patatas, 2 grandes ó 3 medianas, cortadas en cuadraditos
- Cocer a fuego lento-medio con suficiente aceite (de oliva, por supuesto) para que no se pegue
- Añadir sal, ajo y perejil a gusto del consumidor
- Una cebolla bien troceada, pero añadida cuando la patata está a medio cocer
- Esperar a que cueza la patata y tenga una testura pegajosa
- Huevos, de 6 a 9 en función del tamaño
- Batir y añadir sal, otra vez, al gusto
- Calentar a tope la sartén
- Aceite en abundancia
- Vertir el batido de huevo en la sartén con las patatas y la cebolla.
- Dar la vuelta, el paso más importante, con un plato cuando cuaje por debajo.
- E ir dándole vueltas para que cuaje todo, todo y todo.
- Buen vino tinto y a disfrutar...



No quiero dejar pasar hoy sin felicitar a mis amigos "los Korean people", que hoy celebran su año nuevo, sí, sí, rollos del calendario lunar, así hoy más que nunca que ¡Viva Korea!

Para acabar el día un poco de Dinero: mañana concierto en el Island Bar... la noche promete...

miércoles, 2 de febrero de 2011

You never walk alone... again

Se veía llegar, estando Birmingham dónde está, en el centro de Inglaterra y a tiro piedra de todos lados, un viajecito a Liverpool era casi obligado, y así fue, hace dos semanas estuvimos visitando la cuna de los Beatles, el Liverpool y otras tantas cosas que descubrí por el camino.



Para marcarse una excursión improvisada a Liverpool lo mejor es el tren, si se compra con 24 horas de antelación en la página web de CrossCountry te puede salir por 18 libras ¡o incluso menos! Y la frecuencia es buenísima, cada 40 minutos sale uno en cada sentido y tarda cosa de hora y tres cuartos en hacer las 100 millas entre B'ham y L'pool. Así que a las nueve de la mañana nos presentamos en la estación de Lime St. en el mismo centro de la ciudad.

Como solo estuvimos doce horas no quisimos pegarnos la paliza de verlo todo en un día, que Liverpool hay que disfrutarlo, así que elegimos lo que más nos gusto en un mapa, y empezamos, como no, por Anfield, haciendo la ruta por el museo, el estadio y la tienda de regalos, ¡claro! Así que Mario ya tiene su regalo de cumpleaños por sus cuatro añitos, que su tío no pudo apañarle en su momento, joé.











El ticket conjunto de museo y visita al estadio son como unas 9 libras con descuento de estudiante (acordarse de llevar el carné ISIC), el guía es una persona de la casa que lleva toda la vida en el club y que habla español fluido, nos contó que solía veranear en Lanzarote y que cuando se jubilara se iba a pasar los inviernos allí, no sabe nada el hombre.

Y luego a recorrernos el centro de la ciudad, que tiene cierto aire a B'ham pero más bonito y señorial, y es que ser una ciudad de mar se nota y mucho, sobre todo en el viento, y que nadie tiene que ver con la brisa marina de San Juan en Alicante, sino más bien a un viento huracanado que hacía volar las cajas de fish & chips por los aires y ojito que no te diera alguna en la cabeza.





La noria es el lugar perfecto para tener una panorámica de la ciudad, que si bien me hace sentir un poco estafado por pagar 5 libras por 5 minutos de viaje, pero las vistas son las mejores que puedas tener, y es que estánd de moda en Inglaterra, hasta hace dos años también había una en B'ham, pero ahora hay un tremendo agujero que están llenando de hormigón y acero para que se convierta en la nueva Central Library,  qué cosas.

Nos metimos en el Museo de los Beatles en los Albert Dock (antiguos muelles) de Liverpool, que por otra parte con patrimonio de la Humanidad, pero al valer cosa de 12 libras y tener que hacer cola de media hora, decidimos ir a ver más cosas de la ciudad, encontrarnos con algunas teenagers (ejem, ejem) y así acabamos en la catedral, que parece poca cosa desde fuera, pero que impresiona por dentro, ¡sí Señor!



Como ya empezaba a cansarnos de tanto andar, nos dimos un paseo de vuelta hasta el centro y buscamos algún sitio para cenar en el barrio chino, bueno, más bien dicho, en la única calle que forma el barrio chino...


pero acabamos en una hamburguesería tipo América años 50, muy chula por cierto y donde dos de los camareros eran españoles, uno era Victor de Burgos, muy majo el chaval.


Así que media vuelta y para B'ham donde los brummies nos esperaban con los brazos abiertos, bueno o algo así y con la esperanza de volver más pronto que tarde a la ciudad que más me ha gustado de Inglaterra hasta el momento y que gracias a Dios existe, porque sino dónde habrían tocado los Beatles o hubiera marcado goles El Niño Torres...¡eh, a ver dónde!


... y como castigo por estas tres semanas sin escribir nada, un poquito de las comidas que me he ido haciendo estos días: aviso, no aptos para cuerpos low-fat.



... por cierto la tortilla nos la metimos entre pecho y espalda unos cuantos españolitos tal y como cuenta Lateru en su blog.

Prometo escribir más a menudo.
Prometo escribir más a menudo.
Prometo escribir más a menudo.
Cachis.