- Londres
- Bristol
- Manchester
- Liverpool
- Southampton
- Birmingham
Así que me quede con dos ciudades: Bristol y Birmingham, las dos tenían sus ventajas e inconvenientes, la primera es de tamaño medio, con ambiente universitario, barata y con conexión directa a Barajas con Easyjet, la segunda es mucho más grande, con más ofertas de trabajo, moderadamente barata, pero con el incoveniente de no tener vuelo directo a Madrid con lo que había que hacer varios transbordos para llegar, así que finalmente elegí Bristol...
... pero, tuve la suerte de conocer a una compañera en un curso de inglés en Alcalá de Henares, Inma, más maja que las pesetas, y me contó su experiencia en Bristol, porque ella estuvo una temporada viviendo allí y aprendiendo inglés, y entre lo que comentó que Bristol estaba muy bien para aprender inglés, facilidades para encontrar alojamiento, barato y estaba bien ubicada, pero estaba lleno de españoles e italianos, muy buen rollo y muy simpáticos, pero que la cabra tira al monte y al final acababa hablando castellano; llegados aquí a lo mejor se puede pensar que el problema era yo que no quería conocer a españoles, y no se trata de eso, sino que conociendo mis defectillos, al final sería yo el primero que no me esforzaría en utilizar el inglés y buscaría el confort de escuchar castellano. Y como soy dado a seguir los buenos consejos, pues le hice caso, me olvidé de Bristol y continué investigando sobre Birmingham.
Y finalmente Birmingham me convenció, aunque como segundo plato (que me perdonen los Brummies).
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